Todos los años miles de niños menores de siete años se intoxican con productos venenosos que se utilizan en los hogares.
Afortunadamente en la mayoría de los casos es solo un susto y se puede contrarrestan – sin consecuencias graves – los efectos de insecticidas, pesticidas y demás químicos tóxicos.
Los accidentes ocurren pero – como padres o responsables del cuidado de los niños – es nuestro deber minimizar el riesgo y proveer un hogar o guarderías seguros y sanos.
La forma más sencilla de evitar envenenamientos es almacenar los productos tóxicos de uso doméstico fuera del alcance de los niños.
¿Cuáles son los productos peligrosos para los niños?
La variedad de productos tóxicos incluye a los siguientes:
- → Limpiadores y desinfectantes de baño y cocina, incluyendo la lejía,
- → Limpiadores sanitizantes de suelos,
- → Productos para eliminar mohos y hongos,
- → Trampas, cebos y aerosoles contra insectos voladores y rastreros,
- → Venenos, cebos y demás raticidas – especialmente no utilizar venenos en forma de pellets o pastillas –
- → Venenos contra las malas hierbas del jardín,
- → Productos desparasitantes y de higiene para mascotas,
- → Productos para mantenimiento de piscinas.
- → Combustibles, solventes y demás productos almacenados en garajes.
Pasos para evitar problemas
- Lea atentamente las etiquetas de los productos peligrosos y siga las recomendaciones de uso y almacenamiento.
- Conserve los productos en su envase original y nunca los trasvase a envases vacíos que puedan confundirse con alimentos o bebidas.
- Luego de utilizar los productos peligrosos asegúrese de cerrar bien los envases.
- Almacénelos en un cuarto separado de los alimentos y que pueda cerrarse con cerradura o pestillos «a prueba de niños» Aún en la ausencia de adultos…
- Revise todas las zonas del hogar o guardería por donde se mueven los niños, incluyendo garajes y trasteros.
- Si los niños tienen edad suficiente para entenderlo, explíqueles que estos productos «hacen daño y no deben tocarse»
Colóquese de rodillas o en cuclillas – es decir a la altura del niño – y observe los peligros potenciales a su alrededor. Corrija los problemas que observe.
Síntomas de intoxicación
Si sospecha que pudo haber contacto entre los niños y algún producto tóxico, preste especial atención a estos síntomas:
- Dolores de cabeza,
- Calambres musculares,
- Somnolencia,
- Dolores de cabeza y
- Picazón o urticarias.
Si es así, acuda inmediatamente al médico e infórmele de su preocupación.
Si sospecha de algún producto tóxico en concreto lleve el envase o etiqueta al servicio sanitario.
Minimizar los Riesgos
Si se desea minimizar aún más el riesgo de envenenamiento por productos químicos, la solución es reducir drásticamente la cantidad y variedad de químicos en el hogar.
Sustituir productos tóxicos y agresivos por otros naturales y totalmente seguros, evita el riesgo de accidentes con la ventaja añadida de producir un ambiente más saludable.
Productos como limpiadores, desengrasantes alcalinos, desincrustantes ácidos, detergentes y otros muchos pueden reemplazarse con productos derivados de vegetales.
Seguros y eficaces.