Limpieza de Paneles Solares

Los paneles solares son equipos que transforman la energía solar – ya sea lumínica o térmica – en energía aprovechable.

Para que esta transformación sea rentable hay que considerar cuidadosamente la ubicación de los paneles durante la realización del proyecto.
Es necesario maximizar las horas en que reciben la luz solar. Que la incidencia de ésta sea lo más perpendicular posible, evitar sombras durante las horas diurnas y anticipar la posibilidad de rotarlos o al menos cambiar la orientación.

Sin embargo, luego de efectur los estudios preliminares, montar los paneles y realizar la puesta a punto, poca atención se brinda a un factor crucial. La limpieza de las placas solares.

En el día a día se acumulan sobre la superficie de los paneles fotovoltaicos diversos contaminantes que restan rendimiento de forma importante. Suciedades tales como tierra, sales, excrementos de aves e insectos, polen, hollín, musgo entre otros, crean una capa delgada pero apreciable que actúa como una pantalla frente a los rayos solares y como un buen aislante de la radiación solar.

Se estima que la reducción del rendimiento de las placas solares debido a la suciedad que acumulan puede llegar hasta un 20 o 30% de su potencial.

¿Cómo Implementar un Programa de Limpieza de Paneles Solares?

Un plan de mantenimiento debe considerar los siguientes elementos claves.

– Lavado de las superficies de los paneles cada 3 ó 4 meses en el año.
– Utilizar agua libre de sales en general y de dureza en particular (no usar agua de pozo o dura)
– No emplear elementos de limpieza a presión (lavadoras tipo Karcher) porque aunque son eficaces para remover manchas incrustadas pueden deteriorar el equipo.
– No utilizar productos químicos agresivos como álcalis o ácidos fuertes o productos fuertemente coloreados.
– No usar nunca solventes que puedan afectar conectores, metales y otros elementos.
– Evitar productos de limpieza genéricos y en alta concentración ya que es difícil luego remover los restos.
– No incluir en la limpieza elementos como esponjas o cepillos abrasivos que puedan rayar, o peor aún micro-rayar, la superficie de las placas fotovoltaicas.

El Programa de Limpieza

Mojar bien los paneles solares con agua de calidad (sin dureza y con bajo nivel de sales) en la que se haya diluido un tensoactivo no agresivo de alto rendimiento. Verificar que estén bien empapados y que el agua haya penetrado en todos los restos de suciedad.
Remover los contaminantes utilizando paños o esponjas suaves que no dejen restos. Eventualmente es posible utilizar cepillos muy suaves.
No utilizar nunca rasquetas para retirar suciedad adherida. Si se utiliza un buen producto de limpieza no serán necesarias.
Enjuagar con abundante agua de calidad hasta retirar los restos de suciedad y del producto de limpieza.
Secar inmediatamente con paños de calidad – que no dejen restos de pelusas – las superficies de las placas solares para evitar que se adhiera la suciedad que lleva el viento.

Nuestra Recomendación

→ No realizar la limpieza en días de mucho viento porque será más difícil realizar el trabajo, especialmente si las placas están en altura. Además se depositarán tierra y polvo antes de finalizar la tarea.

→ Respetar y cuidar todas las normas de seguridad, especialmente si se trabaja en altura.

Finalmente recomendamos usar como único producto de limpieza nuestro Surfactante Natural.

Un producto obtenido de vegetales, eficaz, seguro y natural.

Con un índice de detergencia elevado, nuestro Surfactante Natural penetra en los restos de suciedad despegándolos de la superficie de las placas solares sin afectarlas.
La suciedad es encapsulada en micelas evitando su deposición posterior y permitiendo su fácil remoción con el enjuague.

Por ser un producto derivado de plantas es totalmente seguro y por ello puede trabajar cómodamente sin usar guantes, mascarillas o molesta ropa de protección.

Nuestro Surfactante Natural es totalmente biodegradable – por ser un derivado de plantas – no contiene fosfatos ni productos químicos y el agua de lavado puede ser dispuesta directamente al suelo o al drenaje ya que estimula los procesos naturales de depuración.